VARIOS


ADVERTENCIA

Las fotos que se insertan en este blog son propiedad de: Jorge Eduardo Lastra Nedwetzki (excepto las tres primeras a la izquierda de esta página). Están tomadas en diferentes paises: España, Portugal, Francia, Alemania, Austria y Venezuela. Las de éste último país son de : Arturo Guillermo Lastra Nedwetzki.

La supervisión técnica del blog está a cargo de: David Alejandro Lastra Nedwetzki.

MIS POEMAS FAVORITOS :
180Susurros del viento.181Balada de otoño. 182La oscuridad es el manto. 184He anclado mi barco. 185Toda hermosa. 186Busca el mar. 29El poeta ha muerto.
Después añadiré otros.

Esto, por supuesto, es subjetivo; cada ser tiene su propia percepción y pocas veces somos iguales en ello

Están situados en Octubre 2009, noviembre 2009 y Junio 2006 la última.

ANUNCIO:Estas mismas poesías pueden leerse en:
http://pateremon2.wordpress.com/

Tambien en: http://pateremon2.tumblr.com/


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lunes, 10 de julio de 2006

54La muchacha triste.(del libro Tiempos 1975)






La muchacha triste 
se encuentra acostada,
sus ojos son negros de dulce mirada,
infantil el alma
que aún no ha crecido,
llena de misterios,
llena de cariño.
Sus negras pestañas 
se mueven y fijas
entreabren al alma
sus dulces pupilas.
Como se refleja la luz que la guarda,
como se refleja la paz y la calma;
es tan silencioso,
es su fe tan clara
es su mundo ancho
como el alma humana.
La muchacha triste
tiene una sonrisa
que habla de algo
que suena en la brisa.
La muchacha alegra,
ríe, ríe, ríe
y todo en el aire
por ella la sigue.
La muchacha es pura,
la muñeca es linda,
pues tiene en los ojos
un alma de niña
y aunque está acostada
y su cuerpo gime,
no le llora el alma
pues su alma ríe.
Hasta pronto niña,
hasta ahora, ven:
la luz es tu signo,
no salgas de él.




2 comentarios:

Princesa115 dijo...

Precioso poema.
En realidad todos tenemos un niño dentro y es algo bonito. Su inocencia y trasparencia

Un abrazo

Jorge Antonio Lastra dijo...

Hola Princesa, si quien no se convierte en niño se pierde lo mejor de la vida.

Saludos y cariños
Jorge A Lastra