258Y te encontré ...
donde las hojas lloran por el amor perdido.
Pregunté por tu vida
y a gritos me espetaste
que aquello era sólo
tus horas y tus días.
Puedes negar si quieres...
Puedes negar tu vida:
pero cuídate, al hacerlo,
por si niegas también lo mejor de ti misma.
Puedes arrinconarme, rodearme de olvido.
Puedes hasta quitar
de tu mente la mía:
pero no podrás olvidar que pasé por tu lado
y te dije cosas que jamás has oído.