29 El poeta ha muerto.(del libro Transparencias 1973)
¡Se murió el poeta!
Cansado del mundo
se fue de la tierra;
y sus ojos tristes,
sus manos inquietas:
no sienten, no tocan,
no lloran, no pecan.
Se perdió en el aire,
se esfumó en la arena:
su espíritu errante
en sus obras vela.
¡Qué triste se pasa!
¡Qué dulce su pena!
¡Qué mundo tan grande
su pensar encierra!
Se nos fue la calma,
se marchó el poeta.
Ya no ven sus ojos
la inmensa belleza
del mundo que antes,
con sus ojos viera.
¡Guarda ante la estatua!
¡Guarda ante la pena!
¡Guarda ante la tumba
de flores cubierta!
¡Ya cayó la noche!
¡Ya se marchó el día!
¡Ya se fue la calma!
¡Ya cedió a la vida!
¡El poeta ha muerto!
¡Nos dejó el poeta!
Que no manche el nombre
la impasible piedra.
Que no ha sido un nombre
que no fue un poeta,
sólo fue un instante
de sublime pena.
Pero los que viven,
los que al mundo anhelan,
los que con los ojos
gozan las ideas,
pónganle en el muro
o en la blanca aldea
donde de la nada
se hizo el poeta,
pónganle palabras
que digan siquiera:
"Aquí nació un hombre
que murió poeta"
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